Judith Márquez: en un lugar de la plástica (2007)

Fundación Gilberto Alzate Avendaño, Bogotá

Museo de Arte Moderno de Caldas, Manizales


Grupo de investigación conformado por: Nicolás Gómez, Felipe González, Jorge Jaramillo, Carmen María Jaramillo, Julián Serna, María Natalia Paillié, Luz Eliana Márquez y Guillermo Vanegas.

La muestra “Judith Márquez: en un lugar de la Plástica” presentó una antología de pinturas realizadas por la artista caldense entre 1954 y 1960, así como una muestra documental sobre la revista Plástica —creada y dirigida por Márquez entre 1956 y 1960—, que quizo identificar y contextualizar los principales aportes de esta publicación a partir de una perspectiva crítica.

Estudiantes y profesores del Departamento de Arte de la Universidad de Los Andes se unieron con el equipo curatorial de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño y con una docente de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, Tunja, para conformar el grupo de investigación En un lugar de la Plástica, que concibió y desarrolló la muestra y una publicación complementaria titulada Plástica 18. Los resultados de la investigación correspondieron a lineamientos de trabajo del grupo y de las entidades que lo respaldaron, en cuanto al interés por recuperar la obra de artistas cuyo trabajo ha carecido del reconocimiento o la difusión necesarios, pese a sus aportes significativos al medio artístico local.

La investigación buscó contribuir al reconocimiento de Judith Márquez como una artista significativa —la primera mujer que incursionó en el campo de la abstracción en Colombia— y como una visionaria gestora cultural que editó la primera revista especializada en artes plásticas, cuya circulación se mantuvo durante un lapso considerable.

En Colombia, la recepción del arte moderno y de la abstracción no se produjo de una forma refleja. Los artistas se abstenían de transplantar a este contexto preceptos radicales, e integraron diferentes modalidades de la abstracción internacional con elemenos de la cultura local, tanto precolombina como popular. Así mismo, los aportes de pintores latinoamericanos como Matta, Lam, Tamayo, Mérida o Torres García sumados al influjo de Picasso y otros artistas modernos europeos, fueron importantes para enriquecer el banco de datos de los artistas emergentes. En este sentido, se propició la convivencia de propuestas que hubieran podido resultar contradictorias o excluyentes en otros ámbitos.

El caso concreto de Judith Márquez puede tomarse como ejemplo de este modo de operar; en su trabajo se integraron diversas fuerzas en tensión como: abstracción y referente natural o abstracción y figuración; también coexistieron las nociones de pureza y neutralidad con distintas alusiones al contexto.

El interés sobre Plástica radica fundamentalmente en sus motivaciones como proyecto autogestionado, en su funcionamiento como vehículo de penetración dentro de nuestro país del pensamiento estético y artístico de más reciente aparición en el campo internacional de mediados del siglo pasado. Plástica fue el resultado de un esfuerzo individual por lograr un ejercicio específico de difusión del arte moderno, interesado en ampliar la extensión de los discursos y debates locales en torno a las artes plásticas; en este sentido, la revista contribuyó  a consolidar un espacio de reflexión que buscó conformar un público para la producción artística local de vanguardia hacia los años cincuenta y otorgar al arte abstracto un espacio legítimo dentro del entramado social colombiano.

PARA VER PRENSA RELACIONADA HAGA CLICK AQUI.